miércoles, 22 de junio de 2011

Cuando sale el Toro



CUANDO SALE EL TORO
o se pierden los papeles, o éste pone a cada uno en su sitio

Ha sucedido en Granada en una corrida especial en la que con matadores de la tierra, se anunciaba el caballero rejoneador Sergio Vegas con un TORO del Partido de Resina, antes Pablo Romero.
Sale el TORO, y todo el mundo de acuerdo en hacer las cosas dentro del mayor desorden posible. Desde y hasta, el hacer público que su matador echaría pie a tierra para darle muerte incluido sorteo, la autorización del presidente del festejo para que ello tuviese lugar sin haber, al menos una vez entrado a matar desde el caballo; el que fuesen cuatro los rejonazos de castigo, la labor ausente de auxiliadores -ese toro siempre estuvo entero- así como el apuntillado traicionero desde la barrera, cuando al no haber sobresaliente ni ser obligatoria la intervención de los espadas de a pie era determinante que a esa  res le fuese dada muerte por el auxiliador determinado previamente.

El TORO fue dueño y señor del ruedo en todo momento; siempre midiendo, colocándose por delante, mirando arriba, pudiendo en los embroques -los que hubo- incluyendo los sesgos en suerte contraria en los que no se pasa el pitón de la suerte. Los caballos dando la sensación de de no estar preparados para poderle a un TORO con esos pies, esa dureza, esa potencia y ese sentido, por lo que la sensación de riesgo aumentaba por momentos; consecuentemente la emoción embargaba los tendidos.

Quiero que exista el Toreo en “puntas”. Independientemente de “puntas o no puntas”, la Tercera Voluntad del Toreo, los Caballos, no pudieron estar mejor: “Pellizco” respondiendo sin ser obligado de boca para aguantar las tarascadas y queriendo torear al pabloromero; “Machado” con su sentirse poderoso y agresivo en las suertes -más en las ejecuciones que en las pasadas- manifestado con su expresivo gesto de orejas; “Hércules” muy en torero, herido ligeramente en la colocación del segundo palo, con dos entradas con los terrenos cambiados  dando el pecho, ajustadísimas y creyéndoselo (quiero ver a este torero más veces) al rematar en triunfador, envolviendo y queriendo toro; ese TORO que tan difícil es ver en la arena, y que fue, pese a la sombría sensación de tragedia,  aplaudido en su arrastre.

¿Ven como en Granada se sabe ver el TORO? Dejémonos de morbosidades, admitamos la Fiesta en toda su Integridad y emocionémonos con el TORO, base de la Fiesta y su rito, con todo su cuajo, trapío y esplendor, como ha sucedido en Granada, de la que se dice que “todo es posible”. La presencia de la tragedia hay que admitirla como tasa y precio inevitable, lo que la engrandece, como esta tarde del Corpus la ha engrandecido Sergio Vegas. Mejor que tragedia, llamarle  sacrificio, como parte integrante que es de su liturgia.
Texto.- José Olid.
Fotos.- Paco Funes 

 Fragata Nº 21

 El Toro
 Pablo Romero

Hercules en el pecho. De poder a poder

 Hercules de poder a poder

 Machado con los terrenos cambiados

 Machado de dentro a afuera

 Machado guinosito y dentro

 Pellizco intenta doblar

 Pellizco triunfador

 Pellizco, los adentros y por delante

 De nuevo Machado sin importarle las PUNTAS

 Fragata, embiste y mide

 Humillaba Fragata

 Vegas sobre las piernas y EL TORO en bravo

 El sentido

 Pitón contrario virgen

Hace presa
 Inevitable

 Cebandose

 Muy dolorido. Se piensa en lo peor

 Consciente de lo que pasa Sergio Vegas


miércoles, 15 de junio de 2011

50 Años de pasión por los Toros

Amanece, y lo primero que hago es darle gracias a Dios, no solamente por permitirme  ver y vivir un nuevo día, sino sobre todas las cosas, por haber nacido español y además aficionado a los Toros; un orgullo que muchos, muchos españoles conocen el significado y la grandeza que guardan estas dos “simples” palabras; Español y aficionado a los toros ¡casi ná! como dirá uno del sur. Ser español es un orgullo, pero si además eres aficionado a los toros y de ese privilegiado grupo que  lo lleva a la práctica, el honor y la suerte no puede ser mayor.
           
Intentaré rendir un homenaje a todos esos aficionados prácticos, tanto a los más jóvenes para que no decaigan ni permitan que esta Fiesta nos la “robe” nadie; como del mismo modo a esos otros, que por similitud en años y hasta quizá pasados de edad para estar envueltos en toda esta vorágine de lo que significa tal actividad, todavía se atrevan como es mi caso, a ponerse delante e imaginar estar en una Feria de postín, con un toro en la mejor plaza del mundo; aunque se trate simplemente de una fiesta campera, delante de una becerrita y en una placita de tientas; ¡qué más da! Lo importante es estar ahí sintiendo esa cercanía con el animal, intentar emular a los grandes maestros y sentir, ¡ay sentir! Que difícil resulta explicar lo que se siente en esos mágicos momentos en los que el alma parece separarse del cuerpo, y todo lo que sentimos, todo lo que realizamos nos parece hacerlo en solitario, como si nadie nos mirara, como si nadie más que el “toro” y nosotros fuéramos los únicos que convivimos en el mundo en ese privilegiado momento, que resulta lo más parecido a estar en un edén.
           
Cincuenta años ¿Quizá para muchos, viejo? Pues bueno y qué -me gusta más esa palabra que la de “mayor”. Yo ya soy mayor dicen muchos, pues mire usted, perdone si le digo que yo de soldado no he pasado. Viejo es sabiduría, viejo es experiencia, viejo es saber “lidiar” lo bueno y malo de la vida con más templanza. Y en el tema que nos ocupa, es cuando al igual que a los profesionales del toreo, ese “poso” que dan los años, del mismo modo que ellos, nosotros también lo hacemos patente cuanto tenemos la oportunidad de estar delante de cualquier becerrita o incluso reses de más envergadura, todo dependiendo del grado de aguante, valor o experiencia en ese estar delante y manejar los trebejos con la sabiduría que cada cual posea.
           
Este post, va dirigido a todo aquél que al igual que yo, experimenta estas sensaciones, por lo que nunca más lejos de la realidad quisiera dar la impresión al resto de lectores, de pedante, engreído o carente de humildad, sino que simple y llanamente, así es como sale del alma.
Vosotros, aficionados prácticos, me entenderéis si digo que después de lo vivido últimamente en el campo y queriéndome retirar de esta ya peligrosa actividad, pudiendo hacerlo con un buen sabor de boca, este sería el momento de poner fin a tan privilegiada actividad. Pero del mismo modo comprendéis y sabéis por experiencia que nunca ocurre esto; siempre estamos ahí, esperando esa oportunidad de volver a salir y demostrarse asi mismo lo que aún es capaz de realizar, lo que es capaz de sentir; nunca se queda uno satisfecho, al igual que los profesionales del toro, siempre nos ha quedado algo por hacer; cuando recordamos lo acontecido, siempre soñamos en algo nuevo; en definitiva y aunque de modo distinto a un profesional, nos sentimos y vivimos en TORERO. ¡Qué grandeza tiene esto del toro Dios mío!

Viejo, vuelvo a la palabra viejo. Os contaré que una vez en uno de los tentaderos a los que fui invitado en la ganadería de Flores Albarrán, allá en plena Sierra de Andújar. Como todos sabemos, después de tentar los maestros suelen darnos paso a los aficionados, con lo que vamos matando el “gusanillo”; pero a la vista de lo que iba saliendo, he de jurar que el miedo se apoderó de mi cuerpo. Así y todo, me dirigí al maestro Manolo Montiel, conocido picador de toros de Linares, diciéndole que cuando viera alguna becerra adecuada me avisara para salir; y para tapar mi miedo, le añadí que no fuera muy grande debido a mi edad. En ese momento como si hubiera tenido un resorte me contestó gallardo y montado en el caballo de picar “Mas viejo era Domingo Ortega y mire usted donde llegó”; bien, contesté yo, pues a la que usted mande maestro. Qué torero Manolo Montiel; a caballo, pero también torero; y que ánimos infunde al aficionado que acude cuando él está en un tentadero; todo un señor, todo un torero. Así que ya sabéis, de viejos nada, a seguir toreando como Domingo Ortega.
           
Aunque no sea el caso, porque llegado este punto hay que respetar y estar cada uno en el lugar que le corresponde. Qué bonito resulta poder decir;  me siento Torero. Qué regia actividad, qué majestuosa palabra, qué privilegio poder sentirse y vivir en torero. Por algo y a pesar de las vicisitudes por la cual está pasando esta Fiesta en la actualidad, sigue siendo la profesión más bonita y difícil del mundo; y el aficionado, este aficionado práctico al que dedico lo que siento como tal, es quién mejor lo entiende, quién mejor me entiende.



















Como dice mi buen amigo “Chicuelinas” ¡QUE EL ARTE NUNCA MUERA!

martes, 14 de junio de 2011

La Trashumancia

El pasado domingo camino de la Finca “El Vadillo” donde como podéis ver en otro post, el Círculo Taurino de Baeza celebró una Fiesta Campero-Taurina; tuve la suerte de poder ver en plena actividad a uno de estos ganaderos que aún quedan y que se dedican a la trashumancia.
Mucho había oído hablar de la trashumancia, ya por los años 73 encontrándome en Teruel me hablaban de D. Alfredo García y D. Benito Mora.
Pude visitar la finca del que ya no tenemos entre nosotros y que desde aquí un recuerdo a D. Benito Mora.
Don Benito Mora tenía una finca llamada “Valtablao” y tuve ocasión de visitar una vez con el reconocido aficionado de Teruel, Raimundo Navarro, a la sazón mi maestro y “culpable” de poder tener el honor de sentir esta locura que es el toreo.
Bueno, dejaré mis andanzas y relaciones en esta bonita provincia turolense y aquí os dejo una reseña de la ganadería que tuve ocasión de ver hacer la trashumancia camino de Santiago de la Espada y que he podido recoger de la página web: http://www.trashumanciadebravo.es/index.html
D. Antonio Fernández García “El Zorro”
Divisa: Roja y Amarilla.
Señal: Zarcillo en ambas orejas.
Asociación: Asociación Nacional de Ganaderías de Lidia
Finca Invernada: " Pastizales" en Baños de la Encina (Jaén)
Finca Agostada: “Arroyo Aldares" y "Valdefuentes" en Santiago de la Espada (Jaén)
Distancia Aproximada: 200 Km
Duración: 12-13 Días
Itinerario: Cruza las sierras de Segura y de Cazorla, la campiñas atraviesa la carretera nacional Ubeda-Albacete, carretera de Sabiote, carretera de la Navas de San Juan por el tramo que discurre por el paraje conocido como la Estrella, cruza la carretera La Carolina-Navas de San Juan, y se adentra en la dehesa propiamente dicha hasta llegar al destino, atravesando poco antes de llegar a la finca la autovía A-92.  Pueblos que atraviesa: La Matea, Arroyo Frío, Burunchel, El Moral, Puente de la Cerrada, Aguas Blanquillas (entre Ubeda y Torreperojil), y el área recreativa la Estrella (Navas de San Juan).
Procedencia: Ingresa en la Asociación de ganaderías de lidia en 1978 por la compra de la ganadería de D. Francisco Esplá Vicente, antes de las Hnos. de D. Francisco Sánchez González.
En 1981 añaden un lote de vacas y un semental de D. Samuel Flores, eliminando el ganado anterior y conservando este encaste actualmente.
En 2005 se forma un nuevo hierro (el de la A) a partir de reses de la ganadería matriz, y el hierro que se adquirió a los herederos de D. Francisco Esplá se sigue manteniendo.
Aquí os pongo el primitivo hierro de Francisco Esplá Vicente, padre de los matadores Luís Francisco y Juan Antonio, es un hierro que personalmente tallé en piedra como regalo para Paquito Esplá, del cual es un honor tener su amistad.

 Hierro de D. Francisco Esplá Vicente
"Paquito Esplá"












Circulo Taurino de Baeza/Jornada en la Finca "El Vadillo"

Dentro del programa de eventos que anualmente organiza el Círculo Taurino de Baeza, el pasado domingo se celebró una jornada taurino-campera de lo más enriquecedora en la Finca “El Vadillo”, de la que es actual propietario el matador de toros y apoderado Alonso del Castillo.
 La jornada empezó a pintar de lo más taurina incluso antes de llegar a la finca mencionada, pues tuvimos ocasión de ver a pie de carretera el paso de una ganadería brava en plena trashumancia, algo que al no ser habitual en estos tiempos resultó de lo más llamativo para muchos aficionados.
Tras la llegada a la maravillosa finca de “El Vadillo”, los presentes pudimos degustar un plato de migas bien acompañadas y regadas donde la tertulia taurina no se hizo esperar, pues dándose la circunstancia de la cantidad y calidad de los aficionados con los que cuenta esta entidad taurina baezana, resultó de lo más amena.
Seguidamente el reconocido aficionado taurino y componente del Consejo Consultor Taurino con que cuenta el Ayuntamiento de Baeza, Manolo Colomera, fue el encargado de hacer las veces de mayoral, acompañado del propio ganadero de ir a campo abierto en busca de las becerras que serían apartadas para delicia de todo aquel que más tarde se tiró al ruedo a demostrar sus habilidades y conocimientos en este maravilloso “arte de Cúchares”. Una vez conducidas las reses a las corraletas, los asistentes menos avezados a ver esta tarea campera tuvieron la oportunidad de presenciar la separación de las reses que más tarde saldrían a la coqueta plaza de tientas con que cuenta esta finca.
Y llegó la hora de la verdad, tras un anterior y exhaustivo sorteo como mandan los cánones, sonó el clarín para que hicieran el paseíllo hacia un palco de lujo formado por las señoras de los socios del Círculo Taurino de Baeza, donde se dirigieron las cuadrillas formadas por Alejandro Moreno “El Gasolina”, Paco Guzmán “Peluquerito” y Anatolio Melgar “Niño del Trombón”, que tras saludar a las respetables damas de honor se dirigieron al burladero correspondiente; donde uno a uno bajo la dirección artística y atenta en todo momento de Miguelito Nebrera “Cocherito”, lidiaron lo que les tocó en suerte y se había enchiquerado momentos antes para tal evento. Las faenas realizadas por la terna actuante estuvieron en todo momento a la altura de las circunstancias siendo del agrado de un público el cual y perteneciendo a tan prestigiosa entidad taurina baezana estuvo de lo más exigente con los diestros actuantes.
Con el capote sobresalieron las verónicas de Paco Guzmán “Peluquerito” ante una res a la que tuvo que templar mucho ya que se le colaba por ambos pitones. Con la muleta destacar las faenas de Alejandro Moreno “El Gasolina” así como Anatolio Melgar “Niño del Trombón” los cuales derrocharon ganas y pundonor en todo momento ante unas reses que a la postre fueron las más exigentes y de menos juego del encierro.
Al final del festejo y tras la triunfal salida a hombros de todos los toreros, nos dispusimos para ir al comedor donde una tertulia de hermandad entre socios, amena y cordial sobre el festejo celebrado, hizo de la hora de la comida otro momento entrañable y de sabor taurino. Sabor taurino y nunca mejor dicho, ya que de sobresaliente se puede calificar el estofado de carne de vacuno bravo servido, toda una “delicatesen” al paladar junto a ese otro manjar que es la carne de lomo de bravo preparada de la misma forma que el famoso “lomo de orza”. Todo ello acompañado el trato amable y profesional del personal con que cuenta este complejo taurino, hicieron que los asistentes pasáramos un día inolvidable.
Así a vuelapluma fue lo acontecido por este Círculo Taurino de Baeza, que por algo es una de las entidades de más prestigio que cuenta la provincia de Jaén, ejemplo de aficionados y ejemplo de taurinismo, todo un lujo de jornada que quedará en su historia.
Para finalizar hacer público mi agradecimiento una vez más a Manolo Calvo, presidente del Círculo Taurino de Baeza, y a su vez hacerlo extensivo a todos sus socios, por las deferencias con este modesto aficionado y redactor taurino así como al medio de comunicación que representa, para que el aficionado esté informado de cuanto acontece en la Baeza Taurina, porque esto; aunque haya mucha gente que no lo entienda tiene un gran mérito, es otra forma de hacer y crear afición, de crear hermandad. Estas entidades Taurinas, con mucho esfuerzo, con sus propios medios económicos, con tesón y sobre todo teniendo una gran afición a los toros, hacen que la Fiesta se mantenga viva. Y en los tiempos que corremos, no es poco. Gracias a todos amigos y felicidades por vuestras iniciativas.


Juan Luis Pizarro-Torero de Ubeda

Esta semana es protagonista otro de los toreros con que cuenta esta ciudad de Ubeda, Juan Luís Pizarro. Juan Luís hizo el paseíllo en esta Feria de Santisteban del Puerto donde cuenta son un buen número de seguidores y una sensacional Peña Taurina así como del mismo modo pudimos apreciar un buen número de aficionados de Ubeda.
La tarde no dio para muchas alharacas, la corrida lidiada perteneciente a Arcadio Albarrán presentó muchos problemas a los toreros, mejor presentados los tres primeros, mucha romana y malas intenciones, descastada y sin clase alguna. Generalizó en su comportamiento de muleta el quedarse a medio recorrido, cara arriba y punteando la muleta en todo momento, el peor de la tarde, todo un mastodonte con peores intenciones que un “barrabás” le tocó al torero ubetense Juan Luís Pizarro.
El balance de trofeos fue de una oreja para Juan Bautista y Juan Luis Pizarro y dos orejas para Jairo Miguel, a la sazón triunfador de la tarde.
Juan Bautista estuvo aseado en su primero donde destacaron los pares de Curro Robles que saludó al respetable, en su segundo poco pudo hacer antes una res que quedó mermada al lesionarse en el primer tercio de la lidia.
Jairo Miguel venía de dejar una buena sensación en la Plaza de las Ventas. A su primero le realiza una faena templada pero sin emoción, teniendo que poner todo el torero para poder mantener en pie a un toro que también quedo inutilizado en banderillas, lo mejor la estocada realizada a ley. En su segundo, último de la tarde, Jairo ante un toro rebrincado durante toda su lidia y manso de solemnidad al salir de naja del peto del montado, le realiza un quite por delantales con vistosidad. La faena de muleta tuvo mucho mérito al conseguir a base de tesón y no quitándole la muleta de la cara al toro, una faena vistosa y variada que cala en los tendidos, estocada y dos orejas que le convirtieron en el triunfador de la tarde. Hay que volver a ver a este torero, pero por Dios, no con estos bueyes.
El diestro ubetense Juan Luís Pizarro demostró una vez más la consideración de torero de valor. En su primero, un auténtico “barrabás”, Juan Luís le echó lo que hay que echarle, un toro que sale emplazándose en toriles, que huye al sentir el hierro y se dirige al picador que hacia puerta para volver a sentir el hierro y huir nuevamente buscando el campo, se banderillea en toriles donde izo pasar las de Caín a los banderilleros y donde a la postre Juan Luís le planteó pelea era algo que el torero debía meditar en cuestión de segundos por la papeleta que se le presentaba. Juan Luís contra todo pronóstico comenzó su faena de la mejor manera posible, pases por bajo lidiando a un animal que era toda carne y malas intenciones, bien Juan Luís en el comienzo de faena a un toro “pregonao y con mucho peligro” que echaba la cara arriba y midiendo en todo momento. Bien Juan Luís Pizarro que estuvo todo lo aseado que se `puede estar ante estas circunstancias.
Su segundo toro, quinto de la tarde no cumplió ni en el dicho de “no hay quinto malo”, del mismo modo mirón y de poco recorrido en su falsa embestida tuco muchos problemas, estando  Juan Luís a la altura de las circunstancias en todo momento, algo que el público asistente le reconoció. Mató de una estocada efectuada a ley volcándose en el morrillo del animal, algo que este manso pregonao no se merecía.
Y esto fue más o menos lo que ocurrió en Santisteban del Puerto. No podemos hablar en esta ocasión de tarde de faenas artísticas por parte de ningún torero, pero sí se ha visto un torero con ganas, valor y sobre todo un pundonor que no se le puede negar en ningún momento. Con corridas de este tipo es imposible.
 Buena presentación del de Arcadio Albarrán
 Juan Luís Pizarro en un lance
 Preparando un natural
La gran estocada de Juan Luís
  Derechazo de Juan Bautista

Natural de Jairo Miguel
La aficion de Ubeda apoyando a su torero